
En un pais como Italia, donde los derechos civiles en general vienen pisoteados cada dia y uno de los partidos que gobiernan llamado "Lega Nord" (xenofobos y fascista como pocos) que tiene muy pocas ideas y su principal eje politico es la persecucion a los inmigrantes, ir a la biblioteca y que te den como señalador un papel donde dice "Aqui ninguno es clandestino- Biblioteca zona franca", me da la pauta que no todo està perdido.
Dar vuelta y leer: "La biblioteca de ......... provee sus servicios a todos los ciudadanos del mundo sin distincion de etnia, edad, genero u orientamiento sexual, politico o religioso" no tiene precio.
Cuando lleguè a Italia, la biblioteca fuè mi punto de apoyo, mi refugio y mi contacto con el otro lado del mundo. Era/Es un lugar sumamente agradable, las bibliotecarias un amor y sobre todo tenia acceso a internet gratis. Sin ser clandestina me sentìa muy contenida en esa "zona franca", por eso me causa tanta admiracion que ante proyectos de leyes absurdas; todavia haya medicos, maestros o bibliotecarios que se proclamen contrarios a denunciar la presencia de un clandestino en su lugar de trabajo. Estos profesionales demuestran tener mucha mas cabeza y corazon que quienes, entre orgias y lineas de cocaina, elucubran leyes amorales y llenas de odio, esos que se dicen nuestros representantes...
Ante tanta homofobia, xenofobia y miedo a lo "distinto", este señalador me alegrò el dia.
El señalador termina diciendo: "Ningun bibliotecario, en el ejercicio de sus funciones y en el respeto del codigo deontologico de la profesion, indicarà la eventual condicion de "clandestinidad" de un ciudadano extranjero NOSOTROS INDICAMOS SOLO LIBROS"